¡Hola!
¿Sabéis esa clase de libros que
empezáis sin casi ninguna esperanza pero que luego os encantan y os sorprenden
gratamente? Esta ha sido mi experiencia con Fangirl.
Si tengo que seros sincera, el
que de verdad quería leerme de la autora era Moriré Besando a Simon Snow, pero
decidí leerme Fangirl primero por eso de que Simon Snow es del universo de
Fangirl. La verdad es que me ha gustado mucho más este.
Resumen:
Cath y Wren son gemelas
idénticas, pero solo en el físico. Sus personalidades no podrían ser más opuestas.
Cath es tímida, retraída, prefiere escribir a salir de marcha y Wren… Wren es
algo así como el alma de la fiesta. Hasta ahora lo han hecho todo juntas, pero
al llegar a la universidad, Wren decide que ya es hora de poner algo de
distancia y de tener cada una su vida.
Y así es como Cath acabó en una
habitación con Reagan, una chica bastante borde, y por extensión, con Levi, que
va a donde Reagan vaya.
Sintiéndose acorralada en su habitación y sola
en la universidad, lo único seguro que queda en la vida de Cath son sus
queridos Simon y Baz, el maravilloso fandom que la adora a ella y a su
fanfiction y sus ganas de escribir.
Pero, por supuesto, todo es más
complicado que eso.
Reseña. ATENCIÓN,
SPOILERS.
A veh, a veh, a veh. ¿Cómo
empiezo a contaros lo mucho que ha me ha
sorprendido este libro? Y además para bien.
Debo confesar que quizás no tenga
la mejor trama de la historia, ni mucha acción, pero los personajes me han enamorado. Así que centremos la reseña en
ellos, ¿vale?
Cath y Wren, Wren y Cath. Unidas por el
abandono de su madre, siempre se han tenido la una a la otra. Compartieron su
obsesión por Simon Snow, escribieron fanfiction juntas… Pero poco a poco se
distanciaron. Estamos hablando de una separación casi inexistente mientras
estuvieron en el instituto pues eran consideradas un “pack”, si invitan a una a
una fiesta, invitan a la otra, si se queda con una en realidad se queda con las
dos. Además, aunque Wren sigue disfutando de Simon Snow la verdad es que ya no
lo vive como su hermana, dejó de escribir fanfics, por ejemplo.
Aunque en ciertos momentos, y
dado que la novela está narrada desde el punto de vista de Cath, Wren parece “la mala” (no realmente, pero sí que es la causa de una
buena parte del sufrimiento de Cath), sus
motivaciones son perfectamente entendibles. Quiere una “vida nueva”, no quiere alejarse de su hermana
definitivamente, pero sí algo más de independencia, cosa bastante lógica. Cath no es capaz de gestionar eso muy
bien porque es más tímida, le cuesta hacer amigos, a diferencia de su hermana y
sin Wren se siente perdida. Cath
tampoco sabrá reaccionar a que Wren vuelva a acercarse a su madre (que sigue
sin querer cumplir con el rol de madre aunque sí que quiere conocer a las
niñas) y lo verá como una traición.
Y ahora pasemos a Cath. Tiene su parte negativa y su
parte positiva, lo malo es que muy
estereotípica a veces. Es la friki lectora, tímida, incapaz de hacer amigos
ni de gestionar una vida social, que vive más sus libros que la realidad. Muy
buena en sus clases pero nunca ha conocido la pasión a pesar de tener pareja
(Dato que no viene al caso, algo en mi armario hace ruidos raros mientras
escribo esto y no es mi gato O.O, para que lo entendáis son como las dos de la
mañana y no mola nada xD). Lo bueno es que esto lo compensa siendo muy realista, es decir que aunque parte de un estereotipo
un poco manido, alcanza más profundidad gracias a lo mucho que la
conocemos. No es perfecta, es extremadamente insegura y culpa a los demás (Wren) con facilidad, asume cosas demasiado rápido y en
ocasiones se comporta como una niña
(Le entregó a su profesora de escritura creativa un fanfiction como relato. Por
favor). Pero sin embargo no termina de caer en el tópico de niña desvalida y
tonta. Al contrario. Tiene un sueño,
escribir, y lo persigue con todas sus fuerzas. Tiene momentos de verdadera
valentía y sabe como plantarle cara a las cosas, aunque todo es nuevo para
ella acaba desenvolviéndose con relativa facilidad… Sabe que sus inseguridades
no tienen fundamento y por eso trata de evitar caer en ellas.
Levi es, por supuesto, el love interest de Cath. Y debo decir que
es genial. Me encanta que huyeran del
típico Hot Guy y pusieran a alguien que en mi opinión tira a feo, sin
gracia para bailar y sin ningún encanto salvo lo buena persona y lo divertido que es. Porque es el amor entre dos personas normales, una amor
que podría darse. Además Levi en cierto modo es una especie de manifiesto
sobre la universidad y los tipos de personas que pueden estudiar allí: Es medio
analfabeto o disléxico (no puede leer bien y esas son las causas que se me
ocurren), pero aun así sale adelante, a base de prestar opinión y pedir ayuda. Me gusta porque es una manera de decirle a
la gente con dificultades para aprender que pueden hacerlo.
Reagan es la compañera de cuarto de Cath, independiente, con una
vida un tanto difícil (tampoco nada muy dramático, eh) y borde. Resulta ser una
amiga leal, una buena consejera, la única que realmente consigue espabilar a
Cath. Es además la ex de Levi y aunque nos dan a entender que no le resulta
fácil ver como Cath y él tienen una relación, su amistad con ellos es tan
fuerte que los ayuda a estar juntos.
Y ahora un poco de la trama. La
historia gira en torno a Cath en la universidad, cómo pasa de no poder salir y
alimentarse a base barritas a llevar una vida un poco más normal. Pero sobre
todo trata de Cath persiguiendo su sueño de ser escritora. Se desvive por
terminar su fanfic, que es muy famoso por cierto, escribe cada vez que puede y
defiende su obra con todo lo que tiene (Hola, Nico); pero la trama se centra
especialmente en la vida universitaria de Cath y Wren y como se distancian por
distintos motivos (el alcohol, las fiestas, la distancia y sobre todo su madre)
El tema de la madre es quizás de
lo que más juego da a la novela, pues Wren se acerca a su madre y el libro lo
presenta casi como si fuera algo malo, porque daña a su hermana y a su padre y hay
que avanzar bastante en el libro antes de escuchar la versión de los hechos de
Wren y aún entonces, por otras cosas que ocurren, la dejan como alguien que ha
tomado muchas decisiones equivocadas o estúpidas, a pesar de que las más
importantes para la historia son perfectamente coherentes y no son reprochables
(que quieras conocer a tu madre no es motivo para que tu hermana monte un
pollo) y las que quizás tengan menos lógica, siguen siendo decisiones
totalmente personales de Wren y aunque quizás sería mejor no tomarlas tampoco
merecen la decepción de Cath, no sé.
El libro viene además acompañado con páginas en las que incluyen
fanfics de Simon Snow e información sobre el universo, y aunque al principio
las leía a medida que avanzas en la trama, al menos yo, me las empecé a saltar.